Un arte ancestral
La forja es un arte ancestral que consiste en el proceso de fabricación de objetos por medio del moldeado de metales calentados a altas temperaturas. El trabajo del forjador, dando forma al hierro candente por medio de golpes dados con un martillo, es la perfecta metáfora del creador que con el esfuerzo de sus manos y creatividad logra dominar los secretos del fuego y la naturaleza para crear belleza.
Sin embargo, se cree erróneamente que las forjas son solo para muebles de jardín y cerraduras, sin estética alguna, que exhiben un estilo rústico que no va bien con todo tipo de ambiente. Las nuevas formas en forja para objetos cotidianos han demostrado que las creaciones en hierro forjado son una obra de arte más que pueden ser parte de nuestros espacios cotidianos.
Un nuevo mundo
Comúnmente conocemos la forja en trabajos de cerrajería, herrajes y muebles. Este trabajo artesanal ha dominado el mercado de la decoración de hogares por largo tiempo y los compradores han tenido la persistente idea de asociarlo con estilos medievales, haciendas y casas de campo. Esta recurrente idea acerca de las forjas ha ocasionado que no se piense en nuevas formas y usos.
Sin embargo, en los últimos años una nueva generación de forjadores se ha empeñado en dar a la forja nuevos aires que le permitan recobrar su presencia y uso como elemento funcional y decorativo para el hogar. Así, es posible encontrar nuevas formas en forja como lámparas de pie y sobremesa, esculturas que simulan árboles, animales y otras figuras que sirven de exquisito elemento de decoración. Se ha abierto así todo un nuevo mundo para la forja.
Nuevas formas sin límites
Otros objetos cotidianos que han adquirido nuevas formas a través de la forja son los revisteros, taburetes, carritos de camarera, escudos heráldicos y relojes que, hechos con el hierro moldeado, adquieren un atractivo aspecto para la decoración. Esta variedad de objetos y formas hacen que el comprador deba poner mayor atención a los estilos y a los gustos para que no se pierda la armonía en la decoración.
Las barandillas de forja, por ejemplo, exhiben una amplia y variada gama de formas, estilos y colores, sin perder por ello su funcionalidad y seguridad, que pueden satisfacer todos los gustos con detalles de flores, hojas, animales y un sinfín de motivos que esperan por usted. El límite de las nuevas formas de la forja está en la creatividad y el gusto.